Lo revelado por el Centro de Promoción del Empleo y Formalización Empresarial es realmente preocupante. Al parecer, el problema en Lambayeque no es la falta de oferta laboral formal, sino los perfiles de los postulantes. En el 2022, de un total de nueve mil puestos ofertados, ocho mil quedaron desiertos.
“Los indicadores de empleabilidad en Lambayeque no son tan halagadores como quisiéramos. La tasa de desempleo, según el Instituto Nacional de Estadística e Informática – INEI, bordea el 5.5 %, cifra que es alta en relación a la tasa tradicional que había en Lambayeque de aproximadamente 4 y 4.2 %”, menciona Alberto Guzmán Enríquez, jefe del Centro de Promoción del Empleo.
Anota que la tasa de informalidad laboral es otro serio problema del sector, pues alcanza al 76 % de la fuerza empleada a nivel regional, de acuerdo a las últimas estadísticas del INEI. Eso significa que de cada 10 trabajadores, al menos ocho están en la informalidad, sin gozar de derechos laborales plenos, seguridad social y previsional.
“Ante esta situación estamos buscando diferentes estrategias para poder cerrar esta brecha. Una de ellas fortalecer el acercamiento con el sector empresarial. Para esta primera semana de marzo tenemos programado un encuentro con 20 empresas importantes de Lambayeque, a fin de recibir su oferta y conocer qué vacantes tienen para ser ocupadas por quienes están buscando una oportunidad de empleo”, señala.
Otra de las actividades programadas para impulsar el empleo formal es la realización de una feria laboral, que tendrá lugar este jueves 2 de marzo en el Centro Cívico de Chiclayo, al lado del Banco de la Nación.
“Estamos proyectándonos para ofertar alrededor de 500 vacantes, que esperamos puedan ser cubiertas por los postulantes”, indica.
Problema de perfiles
Guzmán Enríquez considera delicado que la mayor parte de la oferta laboral en Lambayeque no sea cubierta debido a problemas con el perfil de los postulantes. Es decir, no se logra reunir a potenciales trabajadores que cubran los requerimientos de las empresas, principalmente en el sector productivo.
Señala que el Lambayeque está perdiendo, desde varios años, ofertas de empleo por esta razón.
“A pesar de la crisis, sí hay oportunidad de empleo. Sin embargo, las perdemos. El año pasado hemos perdido ocho mil ofertas de empleo por los perfiles ocupacionales. Las empresas están exigiendo perfiles que no calzan con los perfiles con los cuales se prepara desde la universidad, institutos y las escuelas secundarios”, manifiesta.
Comenta que todas las empresas con demanda laboral insatisfecha se ubican en sectores como el financiero, comercio, servicios, de agroexportación y turismo.
“Ante esta problemática nos hemos reunido con los tres directores generales del Ministerio de Trabajo y la viceministra de Promoción del Empleo y el propio ministro, Adolfo Adrianzén, a quien hemos expuesto no solo la problemática, sino también las alternativas de solución que proponemos como Centro del Empleo, con el objetivo de ayudar a cerrar esta brecha”, destaca.
Propuesta a aplicar
Alberto Guzmán expone que la propuesta es que el Programa Nacional de Empleabilidad, que es el resultado de la fusión de los programas Jóvenes Productivos e Impulsa Perú, se enfoque en los perfiles ocupacionales de la región y convoque a las instituciones formativas a fin de implementar en sus currículos de estudio y planes aspectos relacionados a la realidad ocupacional que tienen las empresas.
Sostiene que si ese cambio de visión en los planes educativos del nivel superior no se da y no se logra conectarlos con las demandas del mercado, más oportunidades de empleo formal se seguirán perdiendo en Lambayeque, restando oportunidades de desarrollo para la Población Económicamente Activa.
“No necesitamos más contadores o más abogados, que no son requeridos por el sector productivo. Lo que necesitamos son técnicos, operadores, especialistas en agroexportación y otras ramas relacionadas a los ámbitos logísticos, industriales y productivos”, anota.
Guzmán Enríquez comenta que entre el 2020 y el 2021 se tomó la decisión política de poner en marcha el programa Emprende Seguro, que implicaba una capacitación de seis meses a los emprendedores que se inscribieron, a quienes se les otorgó un capital semilla de dos mil soles, sin retorno, y créditos de hasta 20 mil soles, para ser pagados en un año, sin intereses.
“Pasado ese año se les otorgó otro incentivo de hasta 20 mil soles, lo que demuestra que sí es posible promover programas e iniciativas orientadas a este tipo de formaciones, pero para las que se requiere voluntad política, porque nacen desde arriba, desde el más alto nivel, y eso es lo que le hemos explicado al ministro del sector. Lo que se necesita es que se retomen y se pueda impulsar también el autoempleo, sin descuidar la promoción del empleo directo digno y decente, para enfrentar la informalidad”, acota.
Capacitación
El jefe del Centro de Promoción del Empleo en Lambayeque señala que necesario afianzar la capacitación en aspectos productivos y técnicos, de tal manera que la población que postula a puestos de trabajo en la región.
“El problema es que cuando las empresas miran a las universidades o instituto para ver si es que se está haciendo una formación similar a la que requieren, no la encuentran, por lo que vuelven al ciclo de contratar, capacitar, empoderar y después perder al trabajador que busca otras alternativas. Eso genera un problema muy serio en el aspecto productivo, situación que no se vive con otros profesionales como contadores, abogados o ingenieros. En las actividades laborales del sector productivo hay un vacío de formación que la oferta educativa en el nivel técnico o superior no logran cubrir”, manifiesta.
Descentralización
Alberto Guzmán comenta que otra estrategia implementada por el centro es la descentralización de sus servicios, apoyándose en los gobiernos locales.
Esta iniciativa empezó en noviembre pasado, cuando se convocó a los alcaldes electos para el período 2023-2026, acudiendo 28 nuevas autoridades. De estas 15 se comprometieron para que a más tardar el 30 de marzo de este año se abran oficinas de promoción del empleo en sus jurisdicciones.
“Planteamos esto porque no es justo que desde Oyotún, Chongoyape, Olmos, Motupe o la zona altoandina, vengan las personas hasta Chiclayo para acceder a los servicios del Centro del Empleo, cuando tranquilamente pueden recibir atención en sus propias localidades con beneficios que son gratuitos. Con el Certificado Único Laboral se pueden obtener antecedentes policiales, penales y judiciales en menos de 5 minutos y de manera gratuita, sin necesidad de viajar, hacer colas y demoras”, indica.
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