El 18 de octubre del 2011, el equipo proyecto de inversión ‘Puesta en valor de Chotuna Chornancap’, dirigido por el arqueólogo Carlos Wester La Torre, realizó un hallazgo sorprendente al norte de Chornacap. Encontraron una residencia de élite en cuyo interior, cerca del altar principal aparecieron intrusiones con ofrendas como vasijas de color gris y otras rojo y crema. Al retirarlas, hallaron finas telas pintadas y debajo una poza de barro con pisadas que correspondían a cuatro individuos diferentes. Estaban próximos a descubrir algo sorprendente.
Al profundizar en las excavaciones hallaron el fardo funerario de un personaje con una máscara con lágrimas y bienes de prestigio. Este personaje principal era la Sacerdotisa de Chornacap, una mujer de unos cincuenta años que estaba sepultada con ocho mujeres jóvenes y algunos camélidos.
La historia de un descubrimiento
Pero las investigaciones en Chornacap datan de treinta años antes del descubrimiento de la sacerdotisa. En 1980, el arqueólogo estadounidense Christopher B. Donnan registró una escena polícroma de un desfile de personajes ricamente ataviados que llevaban armas y cabezas de decapitados y se dirigían a una plataforma baja en la cual reposaba un ser de apariencia felínica.
Sin embargo, no sería hasta el 2009 cuando el Proyecto Arqueológico Chotuna Chornacap se reabrió con Carlos Wester a la cabeza y se amplió la zona sur que investigó Donnan. Por esos años se descubrió un trono con plataforma delantera y dos pedestales que representaban la forma de una media chacana. Se sabía que esa era un área de acceso sumamente restringida para la élite gobernante.
Ya con el hallazgo de la Sacerdotisa de Chornacap se pudo corroborar la importancia de este descubrimiento. La gobernante fue encontrada con bienes invaluables en su fardo funerario como una máscara de plata con corona, brazaletes, sortijas, narigueras, orejeras, un cetro y una corona, todos labrados en oro y plata. Había objetos de cerámica, vasos ceremoniales, vajillas del estilo Cajamarca-costeño (posible conexión entre ambas regiones por lazos comerciales y matrimoniales), además de las ocho mujeres menores de veinte años que fueron sacrificadas a su alrededor.
Tanta fue la importancia de este hallazgo que los bienes de esta sacerdotisa, que gobernó entre los siglos XII y XIII d.C., han sido expuestos en museos del Perú y el mundo como el Museo de la Nación en Lima, el Museo Paul Getty en Los Ángeles, el Museo Metropolitano de Nueva York, el Museo Quai Branly en París y el Museo de Oro en Colombia. Su importancia política y religiosa ha sido comparada con el rol que desempeñó la Dama de Cao dentro de la cultura Mochica durante siglo VI.
Actualmente, lo hallado se encuentra en el Museo Brüning de Lambayeque, pero también desde el 2009 existe un museo de sitio en Huaca Chotuna, sector Bodegones, donde se exhibe una recreación del arribo, desembarco, muerte y funeral de Naylamp, así como objetos de cerámica y de metal descubiertos de las investigaciones realizadas en la zona arqueológica.
Deja tu Comentario