El Teatro Moliné ha sido el escenario donde se desarrolló el pasado viernes cinco de abril, un gran concierto con motivo de las fiestas de Pascua de Resurrección, siendo ocasión propicia para dar la bienvenida al flamante Obispo de Chiclayo, monseñor Edinson Farfán Córdova, quien además desde el 16 de marzo del año en curso, preside la Asociación Civil Santo Toribio de Mogrovejo, entidad promotora del colegio homónimo.
“La providencia permitió que tengamos este concierto denominado Himnos de Victoria para honrar y glorificar a Cristo Redentor y además para rendir homenaje a nuestro nuevo Obispo”, expresó eldirector general de la IEP Santo Toribio de Mogrovejo, Rolando Monteza Calderón, Pbro. Recordó además, que para la celebración de la fiesta de Pascua del año 2023 el concierto que también estuvo a cargo del Coro y Orquesta Sinfónica de Chiclayo, coincidió con la despedida de monseñor Robert Prevost Martínez, como obispo de nuestra Diócesis.
Sentido de gratitud
En su momento monseñor Edinson Farfán agradeció todas las muestras de cariño manifestadas en actos diversos, como este evento. En su elocución recordó que se encontraba en Roma gestionando proyectos para su diócesis de Chuquibambilla, pero el Señor determinó que al día siguiente en Nuncio Apostólico del Perú lo llame para comunicarle que el Papa Francisco lo nombró obispo de Chiclayo. Asimismo, recordó que en su momento, cuando Trujillo lo despidió para trasladarse a su sede de Chuquibambilla, la Universidad Católica le ofreció también un concierto. Manifestó que se siente honrado de recibir estas muestras de aprecio. Tuvo palabras de reconocimiento al bello espectáculo con el que había sido obsequiado como parte de los actos de cálida bienvenida que ha venido recibiendo por parte de la gente del pueblo chiclayano.
Valoró vivamente el trabajo de los artistas del Coro y la Orquesta sinfónica y les animó para que sigan contribuyendo a acrecentar la cultura de la Ciudad que lo ha recibido con los brazos abiertos.
El público asistente, fiel seguidor de la música académica que cultiva el COSCH, quedó gratamente complacido por un renovado repertorio de piezas musicales muy propicias para la ocasión: Una celebración plena de alegría y solemnidad para los fieles seguidores de la doctrina y enseñanzas de Nuestro Señor Jesucristo.
La directora del Coro, Luzmila Milagros Coronado Carhuapoma, fungió como Maestra de ceremonias presentando el programa elaborado para este inolvidable concierto que dejó muy complacido al público asistente. Entre los consabidos temas infaltables en Pascuas de Resurrección nos deleitamos escuchando del COSCH en pleno, el vibrante “Hallelujah” de Haendel, la sentida “Lacrimosa” de Wolfgan Amadeus Mozart y la célebre “O Fortuna” de Carl Orff.
Repertorio
Compartimos con ustedes unos apuntes que pudieran resultar interesantes de algunas de las piezas que refrescaron el repertorio del COSCH, entre las cuales destacamos:
El concierto abrió con el tema que le dio el nombre al evento “Himnos de Victoria” obra de George Frideric Händel, reconocido como uno de los más grandes de los compositores ingleses por adopción ya que nació en Alemania. Este gran himno de resurrección -cuyo texto fue escrito por el pastor suizo Edmond Louis Boudry- es uno de los cantos más populares e imponentes y fue entonado a capella el coro polifónico.
Concebida como un vals para solista con acompañamiento de coro“Voces de Primavera”,es unaobra compuesta por Johann Strauss hijo en 1882. Este tema ha sido ampliamente empleado a lo largo de la historia como fondo musical de diversos espectáculos audiovisuales, por ejemplo en la serie televisiva Los Tres Chiflados, además forma parte de bandas sonoras de películas como Carros de Fuego o La gran ilusión, de Jean Renoir. En 1976, Brian May usó la melodía del vals para componer The Millionaire Waltz y también como parte del álbum A Day at the Races de Queen. La escuchamos en la maravillosa voz de la joven soprano Lisi Pierina Casaró Centurión.
Siempre bajo la batuta del Maestro Israel Balladares la Orquesta Sinfónica de Chiclayo emocionó al público asistente con el tema principal de la fabulosa película cinematográfica “Éxodo”, del genial compositor austriaco, nacionalizado estadounidense Ernest Gold, magnífica composición que fue galardonada con el Oscar en 1961 y el Grammy le otorgó el título de: “Canción del año”.
La obra más conocida de Antonín Dvo?ák es sin duda “Sinfonía del Nuevo Mundo”, compuesta en 1893 durante la estancia del compositor en Estados Unidos en donde la música nativa norteamericana que escuchó, ejerció una notable influencia claramente apreciable durante la interpretación de la Orquesta Sinfónica.
“Nabucco” es la ópera que le abrió las puertas a la fama y al éxito profesional al gran autor italiano Giuseppe Verdi. Con tan solo 28 años, escribió una composición llena de fuerza, solemnidad y dulzura que se estrenó en el Teatro de la Scala de Milán y le valió la eterna fidelidad del público. La trama principal de la ópera se centra en la rivalidad entre el rey de Babilonia Nabuccodonosor y su hija Abigaille, quien trata de usurpar su trono. Abigaille intenta manipular a su padre para que condene injustamente a los hebreos y su hermana, Fenena, hija adoptiva de Nabucco, se enamora de Ismaele, un prisionero judío.
El número más conocido de la ópera es el coro de los esclavos hebreos “Va, pensiero, sull ali dorate…” (Vuela, pensamiento, en alas doradas). En su época, los italianos lo asimilaron como un canto contra la opresión extranjera en que vivían llegando a considerarlo como el segundo Himno de Italia. Esta magnífica obra musical fue magistralmente interpretada por todos los integrantes del COSCH.
Antonio Lucio Vivaldi? ? compuso varios “Glorias” que es un tipo de obra de carácter religioso. El Gloria in Excelsis Deo, es una Doxologia Mayor, un himno litúrgico que forma parte de las piezas obligatorias del Misal ordinario en las liturgias de la Iglesia católica, siendo la más conocida y popular de la música sacra de Vivaldi, compuesta en 1871 y fue interpretado por el Coro y la Orquesta.
?O sole Mio, que significa “Mi sol” es la más popular canción napolitana compuesta por Eduardo Di Capua y Alfredo Mazzucchi con el texto de Giovanni Capurro en 1898. Tema conocido y cantado en el mundo entero, traducido a diversos idiomas y con innumerables versiones que han sido ejecutadas desde orquestas sinfónicas hasta bandas de rock. Ha sido cantada por los principales tenores de la ópera: Luciano Pavarotti, José Carreras, Enrico Caruso y Plácido Domingo, entre otros, llegando a los géneros del rock y del pop de la mano de artistas de la talla de Bryan Adams y Elton John, siendo la grabación que hiciera Elvis Presley con el nombre de “It s now or never” (Es ahora o nunca) la versión más vendida, con una cifra estimada en decenas de millones de copias. Tal fue la popularidad de la pieza que, en los Juegos Olímpicos de Tokio de 1964, llegó a sustituir al himno nacional italiano. Chiclayo disfrutó de esta joya musical en las potentes voces de nuestro solista consagrado, tenor Juan Fernando Castañeda Castro y de un joven solista Diego Arriaga Flores, quien ya se perfila como uno de los grandes valores de nuestro medio.
Finalmente, con los arreglos de Arturo Caldas y Richard Valera, el coro y orquesta sinfónica de Chiclayo presentaron el tema San Miguel de Piura, del cual no hay registro oficial de su autoría, por lo tanto se sugiere que sea llamado de “Creación colectiva”. Tampoco hay consenso si se trata de una marinera o de un tondero. En una investigación sobre este asunto, Mario Cerrón menciona una grabación del tema por la Banda de regimiento de infantería para el sello Columbia que data de 1911. Esta composición fue elegida para dar cierre al concierto como un homenaje puntual al nuevo obispo de nuestra tierra, por ser monseñor Farfán originario de nuestro vecino departamento del norte.
